miércoles, mayo 31, 2006

La permanencia oscura - 1

El futuro no existe, es una irrealidad. El pasado tampoco existe. Fué presente durante el tiempo en que estuvo, en que duró el presente. En lugar de ser una irrealidad, podríamos decir que es memoria. A fin de cuentas los hechos que tuvieron su tiempo, fueron y estuvimos en ellos; o estuvieron otros y nos lo han contado. Diga lo que diga quien quiera, el futuro no existe y no existirá. Llegarán acontecimientos en presente, en nuestro presente y tendremos que vivirlos. Al que dice que le asusta el futuro habría que decirle que lo que le asusta es un presente que está por llegar. El tiempo, en sentido de eternidad, tampoco existe. Existe nuestro tiempo, la duración de nuestra vida, de las categorias, de las cosas. Cuando alguien dice que quisiera vivir eternamente habría que preguntarle: ¿en que tiempo? La historia se ha escrito casi siempre con los ojos puestos en una eternidad inexistente: la divina, que además de eternidad es infinitud y la del poder. Las dos son vanidosas y prepotentes, la divina tiene una osadía por demás sorprendente: es increada. Recomiendo leer sobre el Islam para ver hasta que extremos este concepto de increación genera problemas de modernidad. También en las otras dos religiones del Libro, pero la modernidad ya está aquí, así que habrá que conformarse; la religión calla o se inventa "la evolución inteligente" que es el círculo cuadrado hecho chapuza. La soberbia del poder se traduce en anhelos de perduración: la guardia personal de Darío la componían 4.000 jinetes a la que se llamaba "Los Inmortales". Vestidos igual y vistos en la distancia, eran todos el mismo y cuando moría alguno la reposición confería al conjunto siempre el mismo aspecto. Superchería del poderoso, superstición del humilde; ambas bebiendo de la misma mentira. A los hombres de la guardia de Al Hakem, uno de los Omeyas, se les llamaba Los Mudos; no sabían hablar la lengua de los cordobeses y no les hablaban; se conformaban con aterrorizarles. Esto era psicología casera al margen de inmortalidades fastuosas. La soberbia del poder es el Reich de los Mil Años o el Celeste Imperio o la Sublime Puerta o La unidad de destino en lo Universal. El hombre, vanidoso, se atreve a definir lo eterno sin entender lo absurdo del significado. Ciro, a punto de invadir Grecia, para atravesar el estrecho, construyó un puente de barcos y el mar, con una simple tempestad, lo destrozó; el emperador castigó al Mediterráneo azotándolo; sentado en un trono contempló el castigo ante un millón de hombres, que resignadamente, tuvieron que esperar a una bonanza mejor para cruzar. Cuando uno de nosotros dice "te amaré toda la vida" es algo más modesto, ciertamente porque no promete una eternidad sino una larga duración, que es la personal. Aún así exagera y mejor sería que dijera "te querré toda la vida" si las cosas no se estropean, porque se tiene la tendencia a unir amor con pasión y esa unión es de dudosa duración eterna. Amor y cariño si forman, o deberían aunque solemos estropearlo con demandas impropias, un continúo en las vidas de aquellos que ambicionan envejecer juntos.
Tiempo y muerte forman los dos vectores de la tragedia convertida en folletín. La muerte podría ser tomada también como una irrealidad si consideramos que es el fin natural de la vida. El problema no está en que la muerte nos sorprenda cualquier día y eso constituya la excusa para bajar los brazos; el problema está en no tener proyecto, de uno mismo en su continuidad, de uno mismo en su construcción de la persona que es hasta que la vida dure todo lo que tiene que durar y llegue a su fin de manera natural. Aquí no hay metafísicas, como casi en ninguna cosa, y no lo siento porque soy poco dado a ellas. Prefiero las hermosas físicas en que habitamos que componen el paisaje, el entorno y otras buenas químicas que componen las relaciones entre nosotros. Insisto en el proyecto: si no se tiene los días serán largos.
Hoy, los filósofos van de la mano de los físicos porque ya sabemos que no sabemos un montón de cosas, con nombres y apellidos y categorización, pero tenemos hipótesis acerca de ello y nuestra ignorancia es menor. No tenemos dogmas de fe ni irrealidades etéreas. Para los romanos el alma moría con el cuerpo, para nosotros el alma es una irrealidad poética: tenemos conciencia, inteligencia y percepción y un endiablado sistema multifuncional de neuronas aplicadas a diversas funciones, programadas en diversos subsistemas de los que se empieza a suponer que ninguno de ellos ostenta el liderazgo. Somos una máquina de vida y de su propia conservación; la persona no es sino la reunión de experiencias, la compilación de memoria, el ejercicio experimental de tomar decisiones. El ciclo que nos explican en Atapuerca es sencillo, experimentar, socializar el conocimiento, aprender, aplicar y progresar. Desde la primera herramienta ajena ajena a nuestros dedos, sorpresivamente encarados todos ellos con los pulgares. Desnudos nos podemos reir de nosotros mismos, pero estamos obligados a amarnos porque somos lo único que tenemos. No somos el fundamento del universo, nuestra vida en la tierra se reduce a pocos años comparada con las de las bacterías. En caso de catástrofe (nuclear o no), de nosotros no sobreviviría el menor rastro: las bacterías permanecerían, mutarían a otro organismo dada su simplicidad. Ellas son las reinas de la supervivencia y nosotros no somos sino esclavos del equilibrio medio ambiental. Nuestra cultura es simplemente nuestra, nadie la comparte. Lo bello, lo sublime, lo excepcional, el éxtasis, todos los conceptos enaltecedores tienen solamente valor para nosotros. Lo bello, si no existieramos nosotros estaría condenado a lo que Sartre llama "la permanencia oscura".

13 comentarios:

  1. La vida se ha encargado de enseñarme lo corto que pueden llegar a ser los "para siempre" y que los "aquí y ahora" son lo que únicamente tenemos...pero debo reconocer que una parte de mí es reincidente.

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  2. Pues es claro que la filosofía es la muchacha que se sienta contigo en el café por las tardes, la que te contempla desde el otro lado de la calle, la que te susurra angustias y certezas en las noches solitarias.

    El presente es el punto en el que todo se cruza, el segundo eterno el que el futuro se desvanece y, el pasado, no sé, el pasado quizá lo sea todo, el pensamiento que nos lleva a plasmar una frase, el punto final, el principio de una nueva idea, el album fotográfico de la vida.

    La recomendación es bien recibida y ya estoy en su búsqueda.

    Un abrazo

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  3. "Desnudos nos podemos reir de nosotros mismos, pero estamos obligados a amarnos porque somos lo único que tenemos".

    Esto me cayó de perlas. Debo amarme yo. No esperar a que alguien me ame.

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  4. pero bueno, regreso al punto...entonces lo que dice la Biblia no es creible?

    de plano Luis, cada día tus textos son más y más para que la almohada no descanse.

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  5. y la palabra FIN la odio. Me duele mucho cuando algo termina.

    Con esta lluvia, entonces me quedo con el HOY para latir y vivir.

    Luis, vas a reventar mi cerebro.

    PD. Saludos a VB. La extraño.

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  6. Me gustaría, en un presente no lejano, que la permanencia oscura de ambicionar envejecer junto a alguien fuese algo bello. ¿Alguna bacteria contamina con ese deseo?

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  7. También saludo yo a VB y a su tendencia a la reincidencia. Creo que se cura con los años. He ojeado tu blog y he encontrado cosas que me han gustado mucho. Creo que hay que incidir en los textos propios y mantener solamente comentarios como contraste de parececeres. Tus opiniones en tu blog me han servido de mucho.

    José Antonio: gracias por tus comentarios. El presente es acción y el pasado memoria (conocimiento más experiencia más acción) y esa es la fuente esencial de la experimentación. Defines al pasado en tu segundo párrafo magistralmente. Para mi la filosofía son las certezas de partida sobre las que construyo mi vida. Las cotidianas y las trascendentes. Sucede que rechazo por fondo y forma tener una visión poetizada de la realidad, porque creo que deforma mi humanismo. Me gusta la poesía y la practico, por ejemplo en mi blog Versos-versus-versos hay muestras, aunque no es una invitación forzada. Pero creo que la poetización y los niveles mágicos de escritura proponen y consiguen al final una cultura de lectores con tendencias oraculares y poetizantes incluso cuando leen realismo crítico. Es peligroso, se pierde el sentido del lenguaje.

    Clarice: lo que me evidencia lo que veo y leo es que solamente puedo dar fe de una formación científica y humanística que trato de mejorar con el conocimiento. Ningún profeta de Israel pudo percibir lo que son las neuronas o la simple idea de la evolución, o simplemente concebir una sociedad sin un dios patriarcal, autoritario y en ocasiones despiadado. Nosotros si, todo ello y más. No hay libros sagradois, sino el deber de conocer. En el presente.
    Y por favor, no uses mis textos como tortura autodestructiva.

    Buenas noches.

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  8. Ana C, creo que no, se llega a través de sucesivas pruebas, de suerte o yo que sé, se llega pero teniendo pareja, sin tenerla es difícil.
    La permanencia oscura además no es eso. Se trata de que aquello que existe, si el hombre no lo percibe y revela (no existe la humanidad, por ejemplo y es incapaz de encandilarse ante un paisaje bello: el Bierzo sin ir más lejos) está condenado a "permanencia oscura": existir sin sujeto de revelación.

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  9. No me torturo. Es interesante todo lo que escribes y provoca a que piense y piense. Y me saltan las preguntas.

    Estaré calladita.

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  10. Es cierto lo que dices Luis, agradezco tus palabras y buscaré tus poemas. Pero, por otro lado es necesario que existan los folósofos, los poetas, los realistas y los soñadores, puesto que la vida es un caleidoscopio que dibuja formas diferentes ante cada espectador, ante cada interprete de la misma.

    Yo creo que todas las visiones son válidas, deliciosas, y muy estimulantes en su momento.

    Por lo pronto, yo soy irremediablemente un soñador, y donde alguien ve pura causalidad yo suelo ver magia y, es cierto, hay en ello una dosis de peligro.

    Es un placer conversar contigo. Un café o un buen tinto no caería nada mal.

    Un abrazo

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  11. Gracias Luis por sus palabras!!!
    Terminé con mi blog pero ahora ando de vagabunda por la blogosfera leyendo sólo a mis preferidos.
    Un abrazo!!!

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  12. Yo confieso ser habitante de Realfan, un lugar realmente fantástico, necesito refugiarme allí varias veces al día. Me da igual que me acusen, mi espalda puede con todo tipo de acusaciones. Las dosis de realidad se compensan con la mágica irrealidad.

    Como José Antonio, confieso ser una soñadora...qué le voy a hacer si yo, salí del Mediterráneo.

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  13. That's a great story. Waiting for more. » » »

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